Las juntas y los empalmes son una parte esencial de la estabilidad de un sistema. Hay dos maneras muy comunes para crear juntas entre tus revestimientos de pared y tus suelos. El primer método es el de solapado, en el que el revestimiento de pared se superpone con el suelo y la junta se sella con masilla. El siguiente método es el de la junta de transición.
Cuando instalas un revestimiento de pared, las juntas lisas y seguras facilitan la limpieza y evitan que se acumule la suciedad, la humedad, las bacterias o los parásitos. Los revestimientos de paredes Altro se pueden asegurar mediante el uso de uno de los cuatro tipos diferentes de juntas:
- Juntas selladas: son las más higiénicas, pues se sitúan al mismo nivel de la superficie, por lo que resultan apropiadas para entornos asépticos o quirófanos. Su uso también es apto para hospitales y cocinas.
- De una sola pieza: se utilizan por motivos de seguridad y son idóneas para dependencias seguras, pues se pueden extraer sin dificultad.
- De dos piezas: se instalan rápidamente y con mucha facilidad, proporcionan un aspecto estético atractivo y se adaptan a superficies desiguales. Se suelen utilizar en cocinas, pero se pueden usar en cualquier zona salvo en entornos asépticos especiales o en dependencias de seguridad.
- Altro Whiterock FlexiJoint: eestas finas juntas son exclusivas de Altro, tienen un aspecto atractivo y están disponibles en diferentes tamaños predeterminados. Se pueden usar en cualquier zona salvo en entornos asépticos especiales o dependencias de seguridad.
También disponemos de accesorios para nuestros suelos.